La escuela infantil Mikita se sumergió en una emocionante búsqueda el pasado viernes 24 de mayo. La mañana estaba llena de anticipación mientras los pequeños se reunían para la asamblea matutina. Pero esta vez, algo era diferente. Cuando llegó el momento de sacar a Martín de su bolsa habitual, en su lugar encontraron una misteriosa carta que desencadenaría una aventura inolvidable.
La carta, escrita con la ternura propia de Martín y esta decía: "¡Hola, queridos niños y niñas de Mikita! ¡Una emocionante aventura nos espera! Soy Martín y hoy he decidido jugar al escondite con vosotros. Os he dejado unas pequeñas pistas para que os sea más fácil encontrarme. Debajo de la alfombra del vestuario tenéis la primera pista, junto a una sorpresa. ¡Espero que os lo paséis bien y nos vemos pronto! Os quiere mucho, Martín."
Después de escuchar la carta de Martín, los educadores y educadoras indicaron las instrucciones, los pequeños y pequeñas se pusieron en marcha hacia el primer destino: el vestuario. Bajo la alfombra, descubrieron un sobre lleno de medallas para todos y todas, junto con la primera pista: un trozo de papel higiénico. El primer desafío los llevó al baño, donde con ingenio encontraron la siguiente pista en el tendedero de la ropa.
La sala de juegos fue el siguiente destino, donde una sorpresa inesperada los aguardaba: ¡un gorro de uno de los niños de mikita! Intrigados, volvieron al vestuario para continuar su búsqueda. Allí, encontraron una cuchara diminuta que los condujo a la cocina. La emoción creció cuando descubrieron que la siguiente pista estaba llena de arena, indicándoles que debían dirigirse al parque.
Con determinación, se vistieron y se calzaron, listos para enfrentar el desafío final. En el parque, la excitación alcanzó su punto máximo cuando un niño del grupo de las abejitas anunció que había encontrado algo extraordinario en la polea de transportar arena. ¡Era Martín!
La diversión y la risa llenaron el aire cuando los niños y niñas se reunieron alrededor de Martín, celebrando su éxito. Compartieron historias de su emocionante búsqueda mientras disfrutaban del sol y la alegría del parque. Fue una mañana llena de diversión y descubrimientos, un recuerdo que tendrán para siempre en sus corazones llenos de felicidad.
